martes, 24 de marzo de 2009

Y otra más de Mr.M

¿Cómo de que no? si este hombre es una fuente inagotable de bestialidades.

Hay una señal inequívoca de que ese cuate nomás no es para ti: que se arregle más que tú.

Que conste que cuando yo salía con Mr.M estaba recién desempacada del Williams, la guarrez Septienita no se colaba en mis venas y por supuesto que usaba seguidón falditas, me alaciaba el pelo diario etc...

El caso es que un viernes quedamos en ir a ver Sweet Home Alabama (a petición de él) al cine que está enfrente de mi casa.

Mi mamá tenía que ir a algo a esa plaza y me fue a botar.

Encontrome adentro del cine a Mr.M con unos gigantescos lentes Ray-ban (cuarto oscuro...), camisa con 4 (no dos ni tres, cuuuuuuatro!!!!) botones desabrochados y actitud estilo Kairo o cualquier equivalente a una boy band noventera.

Cuando nos acercamos más yo le veía algo raro pero nomás no cachaba que era y mi madre alarmada me llamó con algún pretexto absurdo y me susurró con gran preocupación: !Creo que Mr. M trae polvo compacto!!!!

Esa sí fue nuestra última cita, aunque no se preocupen seguirán oyendo de él, ya recordaré anécdotas intermedias.

Pobrecillo incomprendido, si tan sólo hubiera existido Amandititita... jajaja pensándolo bien que bueno que no, wacalaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!!!

2 comentarios:

Leo dijo...

No entiendo como saliste con eso más de una vez...

Ah, las mujeres. No hay que tratar de entenderlas.

. dijo...

jajajajajajaja resulto ser un metro sexual jojojojoojo, que mala suerte la tuya en ese entonces, saludosss!!!!