miércoles, 26 de agosto de 2009

menú ejecutivo

debo empezar este relato diciendo que el susodicho es un especimen maravilloso, no es una bestia, sin embargo no puede negar su naturaleza y aunque trata de evitarlo, a veces le sale lo bestial.
susodicho: qué quieres hacer amor?
yo: muero por ver synecdoche new york y ya la van a quitar, pero también se me antojan loco unos tacos al pastor.
susodicho: a bueno, por qué no vienes a la casa?
yo: pues por que tengo ganas de ir al cine y/o de cenar tacos, muero de hambre.
susodicho: si igual vamos al cine pero vamos a mi casa no?
yo: (cediendo, por que soy un amor) va, vamos a tu casa.
pienso que para ustedes público conocedor estaría demás la explicación acerca del porqué la urgencia de ir a su casa.
vamos llegando y comento: Oye amor, pero neta tengo muchísima hambre.
Susodicho: (sonrisa irresistible) no te preocupes ahorita vas comer p*to.
como es adorable no pude más que reir.